Insulinización

Clic aquí para ver la publicación original en   

 

Insulinización…palabra difícil de pronunciar, pero… ¿qué significa?

Cuando lo buscamos en el diccionario online de la Real Academia Española, en la pantalla leemos: “La palabra insulinización no está en el Diccionario”. ¿Cómo puede ser si la escuchamos casi a diario? Pero aunque actualmente no existe oficialmente en nuestro idioma, este término importado del inglés (insulinization: treatment with insulin) significa algo bastante sencillo: “tratamiento con insulina”.

Y cuando tenemos diabetes tipo 1, esto es parte de nuestra vida cotidiana. Sin embargo, de sencillo no suele tener nada.

El páncreas de una persona sin diabetes segrega una pequeña cantidad de insulina de manera continua a lo largo del día con el objetivo de mantener la glucosa estable entre las comidas y durante la noche: a esto se le llama insulina basal.

Además, cada vez que se ingieren alimentos, el páncreas segrega una cantidad de insulina  mayor para cubrir los carbohidratos provenientes de esa comida: insulina de bolo.

El objetivo del tratamiento con insulina es imitar lo máximo posible el funcionamiento del páncreas de una persona sin diabetes, y para eso se utiliza una combinación de insulinas con distintos tipos de acción: para cubrir la secreción basal se utilizan insulinas de acción intermedia o lenta y para cubrir los bolos se utilizan insulinas de acción rápida (también llamadas a veces insulinas “de corrección” o “correctivas”).

¿Cómo es un protocolo de insulinización?

Actualmente se aplican básicamente dos variantes o herramientas para nuestro tratamiento con insulina: múltiples inyecciones diarias (MID) o microinfusora (bomba de infusión).

En el caso de terapia MID, y en lo que hace a la insulina de acción rápida (bolo), se suelen aplicar a su vez dos tipos distintos de tratamiento: dosis fijas o dosis variables.

Cuando el médico indica dosis fijas para las cuatro principales comidas del día, por ejemplo, 2-3-1-4, también se establece un esquema de comidas bastante rígido y estático en cuanto a cantidades y horarios, y en conjunto con nuestro nutricionista se prepara un plan de alimentación con distintas opciones de desayuno, almuerzo, merienda y cena.

Por ejemplo, dos tostadas con queso untable y mermelada light o un yogur y una tostada con queso untable para el desayuno, una porción de pollo o carne magra con media taza de arroz y ensalada o con una papa pequeña y ensalada para el almuerzo, etc. Generalmente podemos intercambiar un alimento por otro, pero sumar otra porción o dejar de comer una parte de lo establecido no suele ser una opción.

También existe la posibilidad de aplicar dosis variables de insulina en función de lo que se come, es decir, del contenido de carbohidratos de los alimentos que vamos a consumir. Esto requiere un poco más de esfuerzo de nuestra parte porque hay que aprender a contar carbohidratos. Puede parecer complicado para muchos, especialmente al principio, pero en el trabajo interdisciplinario y en equipo, el médico, nutricionista y educador en diabetes nos proporcionan y enseñan todas las herramientas que necesitamos para una buena gestión de nuestra diabetes.

¿Cuándo aplicamos este sistema de dosis variables de insulina?

Una vez establecido nuestro ratio (gramos de carbohidratos que se cubren con una unidad de insulina), armados con una buena lectura del etiquetado o la consulta de tablas nutricionales en papel o en línea, podemos elegir lo que vamos a comer con mayor flexibilidad, sumando los carbohidratos y calculando la dosis de insulina que nos corresponde en cada caso. Esta opción nos da más flexibilidad que aplicando un esquema con dosis fijas y no necesitamos estar “adivinando” cuando decidimos comer “algo más” o “algo menos”.

En el caso de tratamiento con bomba de insulina, el conocimiento y aplicación del conteo de carbohidratos es una condición prácticamente indispensable para su uso correcto y para poder sacarle el máximo de provecho a esta costosa herramienta. Este es probablemente el sistema que mayor flexibilidad nos ofrece ya que permite aplicar dosis fraccionadas y así cubrir con mayor exactitud la ingesta de carbohidratos.

En otro orden y entre otras cosas, también permite flexibilización en los horarios por la modalidad de aplicación de la insulina basal en microdosis a lo largo del día del mismo modo en que trabaja el páncreas de una persona sin diabetes y la posibilidad de suspender su infusión en caso de retraso en los horarios programados para las comidas.

¿Existe un sistema que sea mejor que otro? La respuesta es NO.

El mejor sistema es el que mejor funciona para cada uno, con su estilo de vida, sus requerimientos y sus preferencias personales.

2 comentarios en “Insulinización”

  1. ANA FELICIDADES POR LA EXPLICACIÓN Y ENSEÑANZA

    SI ALGO HA DEMANDADO EL VIVIR CON DIABETES ES EL ADENTRARME EN UN MUNDO PROPIO DE ÉSTA, QUE REQUIERE EN MUCHOS MOMENTOS UN ESFUERZO NOTORIO.

    UNO DE ESTOS REQUERIMIENTOS ES EL USO ADECUADO DEL LENGUAJE DEL MUNDO DE LA DIABETES, QUE NECESITARÍA SER CONOCIDO DE MANERA ELEMENTAL Y FUNDAMENTAL POR CUALQUIER SER HUMANO, PARA FOMENTAR LA PREVENCIÓN EN SALUD Y EL EMPODERAMIENTO CUANDO HAY YA DIAGNÓSTICO CON DIABETES.

    ES ILÓGICO QUE A PALABRA INSULINIZACIÓN NO EXISTA COMO TAL EN EL IDIOMA ESPAÑOL, ES ABSURDO POR LA CARESTÍA CULTURAL A LA QUE INVITA Y POR LA INVITACIÓN A UNA MARCADA IGNORANCIA ACERCA DEL TEMA.
    CUANDO LA PERSONA CON DIABETES DE MANERA OBLIGADA SE ADENTRA EN ESTE NUEVO LENGUAJE, APARTE DEL SHOCK VIOLENTO QUE ESTÁ VIVIENDO AL DIAGNÓSTICO, SE ENCUENTRA CONQUE LOS CONCEPTOS SON INCIERTOS, Y QUE MUCHAS VECES LOS QUE ESTÁN A SU ALREDEDOR, ESPECÍFICAMENTE LOS PROFESIONALES DE LA SALUD, MUCHAS VECES NO SABEN ADECUADAMENTE TRASMITIRLOS Y MENOS ENSEÑARLOS. Y ESTO PUEDE SER POR MÚLTIPLES MOTIVOS ENTRE ELLOS FALTA DE CONOCIMIENTO, DE ÉTICA, DE ME VALE SORBETE, DE QUE SE LAS ARREGLEN COMO PUEDAN, ETC.
    POR ESO TANTOS TRATAMIENTOS INEFICACES QUE SOLO DAN PIE A TIEMPOS DE VIDA, DÍAS, MESES, Y QUIZÁ AÑOS DE TRATAMIENTOS INSALUBRES QUE REPERCUTEN MALÉFICAMENTE EN EL DIAGNOSTICADO CON DIABETES.

    CUANDO DIGO QUE ESTAS PALABRAS NECESITAN SER CONOCIDAS POR TODOS A TRAVÉS DE LOS CONOCIMIENTOS QUE SE DAN EN EL ÁREA DE CIENCIAS NATURALES, DE BIOLOGÍA, EN LAS ASIGNATURAS ESCOLARES, ES PORQUE SI EL NIÑO VA TOMANDO CONCIENCIA DE LO VALIOSO QUE POSEE EN SU CUERPO PUEDE ENTONCES CUIDAR MÁS EN CRECIENTE SU SALUD AL PASO DE LOS AÑOS.
    PERO TODO ESTO SOLO LO PUEDE HACER SI ESTÁ ARROPADO POR LA COHERENCIA SALUDABLE Y EL CONOCIMIENTO BÁSICO PERO VITAL DE LOS PADRES Y EDUCADORES, QUE AL FINAL SON LOS QUE LO VAN GUIANDO EN EL CAMINO DE LA VIDA Y DE LA SALUD.
    CUANDO TE LEO VEO TANTAS LAGUNAS EN NUESTRA EDUCACIÓN QUE SON LAS PLATAFORMAS PARA QUE LLEGUEMOS A ALGO TAN NECESARIO Y FUERA DE NUESTRO ALCANCE COMO LO QUE MENCIONAS, INSULINIZACIÓN ES UNA PALABRA QUE NO ESTÁ EN EL DICCIONARIO DE ESPAÑOL.
    ANTE ESTO LO ÚNICO QUE NECESITAMOS ES SEGUIR ESFORZÁNDONOS LOS QUE LLEVAMOS UN CAMINO RECORRIDO EN ESTE TEMA, Y SEGUROS DE QUE NUESTRO TRABAJO ES VITAL, NECESARIO Y OBLIGADAMENTE EMPODERANTE.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Scroll al inicio