Me dan el turno y las instrucciones de lo que tengo que llevar para empezar la “capacitación” y aprender a usar la bomba de insulina.
Otra cosa que hay que aprender, otro “curso” que hay que tomar, otro examen que hay que rendir… ¿Por qué será que todo lo que se relaciona con la diabetes tarde o temprano me hace sentir que estoy rindiendo examen?
Me recibe Julieta con una sonrisa que ilumina la sala de espera, y mis nervios empiezan a aflojar.
Empezamos con lo básico, repasando todo lo que hace al manejo convencional de la diabetes y cómo eso se traduce a la bomba. Hasta ahora vamos bien. Nada es demasiado nuevo ni completamente extraño y la sesión pasa volando.
En las siguientes sesiones profundizamos, avanzamos, practicamos y para cuando me quiero dar cuenta estoy “lista” para la sesión en vivo… ¡Tengo que rendir el examen final!
Normalmente, y de acuerdo con el protocolo de Medtronic, se empieza a usar la bomba y recién una o dos semanas después se incorpora el sensor y la función de monitorización continua de glucosa. Yo venía usando un monitor continuo de glucosa hacía ya un buen tiempo y no quería quedarme a ciegas, especialmente ante la posibilidad de hipoglucemias que generalmente se producían sin síntomas y sin previo aviso. Pero por suerte, y para mi tranquilidad, Julieta y mi médico estuvieron de acuerdo en “instalar” todo al mismo tiempo.
Y llegó el día. Ahora sí que había llegado de verdad. Bomba de infusión programada, set de infusión y sensor preparados, accesorios varios listos para usar, mi panza al aire… Pensé que iba a estar mucho más nerviosa, pero Julieta sutilmente me hacía de apuntadora y los nervios desaparecieron.
Si, estaba rindiendo examen, pero esta vez no había nota. Esta vez no iba a aprobar o desaprobar. ¿Había cambiado yo? No creo. Sigo siendo la misma obsesiva de siempre, y con esto no había ninguna diferencia. La diferencia fue Julieta.
¡Gracias!
Lo leo y me emociono! Gracias Ana!
Fuiste mi ángel de la guarda, mi brújula, mi red… me acompañaste en esos momentos llenos de miedos e incertidumbres y sos una de las estrellas que iluminan mi firmamento en este camino que me toca transitar con diabetes…